La Joya Oculta a Plena Vista: El Verdadero Carácter de Maracay.
Al salir del evento, con la euforia de la celebración aún en el aire, el visitante se detuvo en la acera y miró la fachada iluminada. Fue entonces cuando toda la energía que había sentido en el interior cristalizó en una sola idea.
Este teatro no era un edificio. Era un personaje.
Era el personaje de Maracay. La ciudad siempre flanqueada por sus ruidosas hermanas mayores, Caracas y Valencia, esas urbes que siempre acaparan la conversación. Maracay, la que a menudo es "menospreciada", la que guarda sus tesoros en silencio.
El visitante entendió la visión: el Teatro de la Ópera es la joya en bruto oculta a plena vista. Es la personificación de la nobleza de Aragua. Su restauración no era solo física; era el despertar de ese personaje, que se erguía con orgullo para recordar a todos (locales y foráneos) que la grandeza no necesita estar en la capital para ser real. El teatro era la esencia de grandeza del estado.

Comentarios
Publicar un comentario